Mientras que la miel es el néctar natural que fabrican las abejas de forma natural y que tomamos prácticamente del panal; el concentrado de jugo de caña (antes denominado como melaza o miel de caña) se extrae de la caña de azúcar tras un proceso de prensado del que se obtiene un jugo concentrado al que se denomina melaza.
Diferencia entre la miel de abeja y la miel de caña
La primera cuestión importante es que la legislación española en su Real Decreto 1049/2003, de 1 de agosto, recoge que “La miel es la sustancia natural dulce producida por la abeja Apis mellifera a partir del néctar de plantas o de secreciones de partes vivas de plantas o de excreciones de insectos chupadores presentes en las partes vivas de plantas, que las abejas recolectan, transforman combinándolas con sustancias específicas propias, depositan, deshidratan, almacenan y dejan en colmenas para que madure”. Es decir, que la denominación de miel solo se aplica a la sustancia producida por las abejas, todo aquello que no provenga de éstas o de insectos chupadores que se encuentran en las plantas no pueden denominarse como miel.
Y entonces, ¿qué es la miel de caña?
Sí bien, debemos decir que esta denominación de “miel de caña” es la que se venía empleando, la normativa es bastante clara y ya no permite usar esta nomenclatura. Al extracto obtenido de la caña de azúcar debe identificarse como “concentrado de jugo de caña” ya que su origen es vegetal y no intervienen las abejas en su elaboración.
La caña de azúcar es una planta muy conocida ya que además de su jugo para endulzar a partir de ellas se elabora el ron. El concentrado de caña se extrae a partir del prensado de la planta y a partir de él se extrae el jugo concentrado. Después se somete a una cocción para que el calor evapore el agua y se obtenga esta textura concentrada y densa. Normalmente suele tener un color muy oscuro.
En cuanto al sabor también hay diferencia ya que la miel es dulce y sueva, el concentrado de jugo de caña es más intenso y tiene toques ahumados.
Actualmente la única fábrica que produce el concentrado de jugo de caña en toda la Unión Europea está ubicada en Málaga, concretamente en Frigiliana.
Variedades de miel
La miel de abejas se puede clasificar en varios tipos:
- Mieles Monoflorales: aquella miel que procede principalmente del néctar extraído por las abejas de una variedad de planta o flor. Las principales son lavanda, eucalipto, retama, azahar, castaño… Aquí puedes descubrir las mieles especiales de Doray.
- Miel de Milflores: se trata de una miel que procede de varios tipos de flores y plantas con diferente proporción.
- Miel de la sierra o montaña es un tipo de miel multifloral que se elabora en condiciones especiales y ubicaciones naturales muy ricas.
Diferencia entre la miel y el sirope
Los siropes son jugos o jarabes normalmente extraídos de diferentes plantas que suelen usarse como edulcorantes tanto en platos, bebidas como postres. Los siropes más conocidos son el sirope de ágave y el sirope de arce. Existen otros tipos como el sirope de arroz, de maíz o de yuca. El principal componente de los siropes es la fructosa.
El proceso para la elaboración de los siropes es a base de la extracción del jugo de la planta y posterior evaporación de agua para obtener esa sustancia densa.
Al igual que la miel de caña, el sirope procede de los jugos de diferentes plantas, por lo que no pueden denominarse miel, ya que esta identificación solo está aprobada para el néctar elaborado por las abejas.
¿Por qué tomar miel de abeja?
Son muchas las razones, pero vamos a darte algunas claves por lo que tomar auténtica miel de abejas es una de las mejores opciones:
- Se trata de un producto natural 100%
- Contiene sustancias de la naturaleza que nos aportan energía y llenas de propiedades beneficiosas para nuestro cuerpo (jalea real, propóleo…)
- Es una manera natural de endulzar tus platos y recetas.
- La miel no caduca por lo que puedes usarla tranquilamente después de mucho tiempo (siempre que no haya estado expuesta a fuentes de calor o de mucha luz)
- Encontramos muchas variedades con matices diferentes que nos transportan a la naturaleza más pura. Por ejemplo la miel de lavanda tiene un aroma único, o el toque de la miel con azahar son realmente increíbles.
Disfrutar de la miel cada día es uno de los mayores placeres y combinarla con platos dulces o salados es todo un acierto para el disfrute de nuestro paladar.